Título : | Digamos que me llamo Gantenbein | Tipo de documento: | texto impreso | Autores: | Max Frisch (1911-1991), Autor | Editorial: | Madrid : Debate | Fecha de publicación: | 1990 | Colección: | Ultimos Clásicos num. 5 | Número de páginas: | 291 p | ISBN/ISSN/DL: | 978-84-7444-413-1 | Idioma : | Español (spa) | Clasificación: | [Palabras claves]LITERATURA ALEMANA [Palabras claves]NOVELA ALEMANA
| Resumen: | Un día que nunca ha sido, un escritor concibe en su mente los gérmenes de una futura historia, identificándose con un otro protagonista. Una de las posibilidades: que se llame Gantenbein. Otra de las tantas: Digamos que podría llamarse Gantenbein… A cada uno una historia, a cada cual sus juego, sus propias vivencias, un cúmulo de ficciones, que al ser recreadas en la imaginación del autor (el Otro) cobrarían un velo de aparente realidad transmitiendo cierta dosis de apariencia de existencia en los personajes. (“Lo que le sucede a uno es la grieta que atraviesa su persona, la grieta entre él y yo, tanto si hago una cosa como si hago la otra”. Ibd. Frisch, Max. “Digamos que me llamo Gantenbein”).
Gatenbein, Enderlin son existencias meramente probables, porque como dice el suizo Max Frisch: “Siempre ocurre algo, si bien diferente. Y luego, el despertar: ¡Todo esto no ha ocurrido!… Y, no obstante, envejecemos”… (Ibd. Frisch, Max. “Digamos que me llamo Gantenbein”).
No distinguimos el sueño de la vigilia, la ficción de la realidad; la única convicción que de nosotros tenemos es el claudicante paso del Tiempo, que todo lo devora. Nuestra finitud es nuestra única certeza, mal que nos pese…
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Digamos que me llamo Gantenbein [texto impreso] / Max Frisch (1911-1991), Autor . - Debate, 1990 . - 291 p. - ( Ultimos Clásicos; 5) . ISBN : 978-84-7444-413-1 Idioma : Español ( spa) Clasificación: | [Palabras claves]LITERATURA ALEMANA [Palabras claves]NOVELA ALEMANA
| Resumen: | Un día que nunca ha sido, un escritor concibe en su mente los gérmenes de una futura historia, identificándose con un otro protagonista. Una de las posibilidades: que se llame Gantenbein. Otra de las tantas: Digamos que podría llamarse Gantenbein… A cada uno una historia, a cada cual sus juego, sus propias vivencias, un cúmulo de ficciones, que al ser recreadas en la imaginación del autor (el Otro) cobrarían un velo de aparente realidad transmitiendo cierta dosis de apariencia de existencia en los personajes. (“Lo que le sucede a uno es la grieta que atraviesa su persona, la grieta entre él y yo, tanto si hago una cosa como si hago la otra”. Ibd. Frisch, Max. “Digamos que me llamo Gantenbein”).
Gatenbein, Enderlin son existencias meramente probables, porque como dice el suizo Max Frisch: “Siempre ocurre algo, si bien diferente. Y luego, el despertar: ¡Todo esto no ha ocurrido!… Y, no obstante, envejecemos”… (Ibd. Frisch, Max. “Digamos que me llamo Gantenbein”).
No distinguimos el sueño de la vigilia, la ficción de la realidad; la única convicción que de nosotros tenemos es el claudicante paso del Tiempo, que todo lo devora. Nuestra finitud es nuestra única certeza, mal que nos pese…
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